Escoger una pala de pádel no es una decisión que, si quieres disfrutar al máximo de este deporte, puedas dejar a la improvisación. De forma que vamos a profundizar en las características del arma de juego clave de este deporte. Presta atención.
Las claves de peso en las palas de pádel
Son numerosos los factores que has de tener en cuenta para acertar en tu elección, ya que acabarán influyendo en la calidad de tu juego. Además, tienes que adaptar la compra de tu pala a tus condiciones físicas, capacidad como jugador y rasgos de desempeño.
Si llevas mucho tiempo jugando y cuentas con una técnica depurada, te interesará comprar una pala de pádel distinta que si te estás introduciendo en este deporte. Sigue leyendo y sabrás distinguir qué tipos de palas te van a convenir más: las que priorizan la seguridad o la agresividad en el juego.
La forma de la pala
A grandes rasgos, la forma de la pala difiere entre las redondas y las híbridas o de lágrima y las de diamante. Las primeras vienen bien a los jugadores más novatos, puesto que su mayor punto dulce central les permite maniobrar mejor y tienen un gran control.
Por su parte, las híbridas y las de diamante posibilitan a los jugadores más experimentados un desempeño más ofensivo son de ataque, son de potencia, aunque a costa de aumentar su margen de error.
Si no te quieres complicar, busca una pala polivalente y tendrás lo mejor de ambos mundos.
El balance de la pala
El balance es un concepto que tiene que ver con la distribución del peso a lo largo de la pala. Las hay que lo tienen alto o medio. En estos casos se gana potencia a costa de perder seguridad. Lo contrario sucede con las que tienen el balance bajo, las cuales favorecen una mayor protección del codo, cuya articulación puede sufrir durante los partidos. Las primeras convienen a los jugadores expertos, mientras que las segundas se las recomendamos a los principiantes. Si tienes dudas acerca de priorizar la potencia o la seguridad, te aconsejamos que optes por las alternativas de balance medio.
El peso de la pala
Por supuesto el peso es uno de los factores clave para estar a gusto con nuestra pala, el peso para una pala de control y un hombre está en torno los 350-360 gramos, en cambio, si buscamos más potencia, y/o nuestro peso corporal es superior a los 85kg , siempre recomendaremos palas con un peso mayor de 370 gr.
Si por el contrario, si eres mujer necesitarás una pala por debajo de los 350 gr. El último caso que se plantea eres si eres niño, una pala junior suele pasar entre 335 y 340 gramos.
Por su parte, las más pesadas también desgastarán tu brazo, pero por tener que hacer más esfuerzos para levantarlas y llevarlas de un sitio para otro. Eso sí, tendrás que invertir menos fuerza a las bolas para que lleguen a su destino.
El nivel del jugador
Por último, tu nivel como jugador de pádel implica hacer un análisis concienzudo e integral de todos los aspectos que te hemos señalado antes. Sobre todo interesarán a quienes están empezando las palas hechas de materiales blandos, como la goma de polietileno y la fibra de vidrio, que proporcionan más comodidad en los golpes. La dureza de la goma EVA y la fibra de carbono minimizan el efecto muelle y aportan más control.
En definitiva, pon en valor la forma, el peso y el balance de la pala y encontrarás la que se adapte a tu nivel.